HISTORIAS DE INTERÉS

Una paloma que no puede volar se hizo amiga de un perrito que no puede caminar.

El cachorro llamado Lundy es un pequeño especial que necesitaba desesperadamente un amigo. Y lo encontró, aunque fue una sorpresa para todos. Lundy no puede caminar correctamente debido a una enfermedad congénita en sus patas.

El animal fue llevado bajo el cuidado de una organización benéfica especializada en ayudar a animales con discapacidades. Fue allí donde Lundy conoció a otro ser que sabe muy bien lo que significa ser diferente a los demás. Ese ser era una paloma llamada Herman.

El cachorro y el ave tenían mucho en común. El pájaro llegó a la fundación el año pasado, incapaz de volar debido a una lesión en las alas y una enfermedad. Hubo una conexión instantánea entre Herman y Lundy. Los animales se llevaron bien rápidamente, sorprendiendo a todos los empleados de la fundación. ¡Qué amistad tan inusual!

El personal puso al perro y a la paloma en una cama acogedora juntos, y la pareja inusual pasó un buen rato juntos. Herman y Lundy se veían el uno al otro como alguien muy cercano.

Tanto el cachorro como la paloma claramente disfrutaron de la compañía del otro, y el pájaro acariciaba periódicamente la cara del perro con su cabeza. La paloma parecía entender que el pequeño y frágil cachorro necesitaba atención, amor y apoyo.

Aunque ambos pequeños tienen problemas de salud, su maravillosa amistad es la mejor medicina para todas las adversidades que han tenido que pasar en el pasado. Para mascotas especiales como Lundy y Herman, la vida trae muchas sorpresas desagradables con las que los animales saludables nunca se encontrarán.

Pero estos dos ciertamente tuvieron suerte, ¡porque tienen el uno al otro! Gracias a sus cuidadores cariñosos, el perro y la paloma pueden disfrutar tranquilamente de la vida y de su amistad.

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