La Vida de un Hombre sin Hogar Cambia Completamente Después de Devolver el Favor a un Refugio de Animales que Cuidó Amablemente a su Perro

Cuando Pete Buchmann y su querido compañero canino eran personas sin hogar que vivían en una tienda de campaña, un refugio de animales mostró una amabilidad extraordinaria. Cinco años después, el hombre de 58 años sigue devolviéndoles el favor, lo que ha llevado a una montaña de recompensas y una nueva vida.

Desde que terminó la escuela secundaria, Buchmann ha trabajado en la construcción, pero cuando perdió su trabajo en 2014 se encontró incapaz de pagar el alquiler y se vio obligado a mudarse a una tienda de campaña.

Buchmann estaba feliz de acampar por un tiempo, pero la situación era difícil para su perro Buster, que tenía 9 años.

Desesperado por asegurar la seguridad de su cachorro artrítico, Buchmann llevó a Buster a la Faithful Friends Animal Society en Wilmington, Carolina del Norte, y encontró un refugio para personas sin hogar para él un poco más adelante en el camino.

Pero nunca estuvieron separados por mucho tiempo: Buchmann caminaba 8 kilómetros cada día para visitar a Buster. Además, comenzó a ser voluntario en el refugio durante 2 a 3 horas cada día paseando a otros perros.

Después de que los medios nacionales se enteraran de la historia de Buchmann, cientos de personas ofrecieron su apoyo. Un hombre local le regaló una camioneta; una iniciativa de vivienda transitoria le dio seis meses de alquiler gratuito en un complejo de apartamentos cercano; una empresa de seguridad contra incendios le ofreció un trabajo (que sigue manteniendo hasta el día de hoy); y personas de todo el mundo donaron colectivamente más de 39 000 dólares a una campaña de GoFundMe que se creó en su nombre.

Pero esa no es el fin de la historia. Pete nunca dejó de ser voluntario y de donar al refugio de animales, incluso después de que su querido Buster falleciera dos años más tarde.

“Faithful Friends me ayudó a salvar a mi amigo fiel,” dijo Buchmann. “Estaré agradecido para siempre.”

Aunque estaba destrozado, la soledad no duraría mucho.

Los trabajadores del refugio pronto le pidieron a Buchmann un favor: ¿Consideraría por favor acoger a un perro mestizo con problemas que había demostrado ser inadaptable porque ladraba a todo y odiaba a las mujeres? La respuesta fue SÍ.

Atascado en Faithful Friends durante años porque sus anteriores dueños no lo habían tratado bien, Matteo se había vuelto muy “reactivo”. Nadie lo quería.

Buchmann, por otra parte, había creado un vínculo con el perro durante sus caminatas voluntarias en el refugio y decidió llevarse al cachorro a casa por un fin de semana. No pasó mucho tiempo antes de que adoptara a Matteo para siempre.

Porque estaba en un hogar amoroso para siempre, Matteo se convirtió en un perro cambiado.

Dejó de mostrar aversión hacia las mujeres, y solo ladra un poco cuando Pete enciende la aspiradora.