¿Es necesario lavar los huevos antes de cocinarlos? La verdad que muchos desconocen
Los huevos son visitantes frecuentes en nuestra cocina: tortillas, repostería, ensaladas, guisos. Sin embargo, todavía persiste una pregunta sencilla pero controvertida: ¿deberíamos lavar los huevos antes de usarlos? La intuición dice “sí”, pero la ciencia no está tan clara al respecto.

¿Por qué alguien lavaría huevos?
Mucha gente lo hace de forma automática: así lo aprendieron en casa, así se sienten “más limpios” y “más seguros”. Parece lógico, ya que en la cáscara puede haber suciedad y bacterias.
Pero el huevo tiene su propio “traje protector” — la cutícula (también llamada “bloom”). Es una fina película natural en la cáscara que cubre el huevo inmediatamente después de ser puesto.
La cutícula, el escudo invisible
La cáscara del huevo es porosa, con multitud de pequeños agujeros.
La cutícula hermetiza estos poros y:
• impide que las bacterias penetren dentro del huevo;
• retiene la humedad para evitar que el huevo se seque;
• prolonga la frescura del huevo.
Cuando lavamos los huevos bajo el grifo, especialmente con agua caliente o con detergentes, esta capa protectora se desvanece. Como resultado, el huevo se vuelve más vulnerable, no más protegido.
¿Y qué pasa con la salmonela?
Al escuchar “huevos”, muchos piensan inmediatamente en la salmonela. El miedo es comprensible. Pero es importante saber:
• en los huevos sin lavar y con la cutícula intacta, el riesgo de que las bacterias penetren es mínimo;
• la principal protección es precisamente esta capa natural y la membrana interna de la cáscara;
• un nivel adicional de seguridad se logra con una correcta cocción térmica.
Si hierves los huevos, los fríes hasta que estén completamente cocidos o los horneas en platos, la alta temperatura elimina las bacterias posibles en la superficie. El agua no penetra dentro del huevo al hervirlo, gracias a su membrana interna.
Entonces, ¿lavar o no lavar?
No hay una regla “obligatoria” para todos. La decisión depende de:
• el origen de los huevos (tienda, granja, tus propias gallinas);
• las condiciones de almacenamiento;
• tu nivel personal de preocupación y hábitos.
📌 Huevos de tienda en la mayoría de los países pasan por un proceso de clasificación y a menudo un tratamiento preliminar. No es necesario lavarlos justo antes de cocinar si los almacenas correctamente y no los mantienes en un empaque sucio.
📌 Huevos de granja o de un jardín privado a veces pueden estar visiblemente sucios. En este caso, muchos prefieren limpiarlos cuidadosamente de manera seca (con un paño) o lavarlos inmediatamente antes de usarlos y cocinarlos enseguida, sin dejar el huevo lavado por mucho tiempo.
Un poco de respeto por el huevo común
El huevo es un producto sorprendente.
Ya viene con su propia protección, que muchos ni siquiera consideran. La cutícula cuida de su seguridad mejor que cualquier jabón.
La próxima vez que prepares una tortilla o hornees un pastel, recuerda: no es solo “otro producto de la nevera”, sino un sistema con una protección natural cuidadosamente diseñada.
Y tú ¿cómo lo haces tú?
¿Lavas los huevos antes de cocinarlos o confías en su protección natural — y por qué?