El Monasterio Recluta a un Tierno y Esponjoso Fraile para Fomentar Adopciones
Este adorable cachorro es un ejemplo perfecto de las enseñanzas de este monasterio… ¡y además es irresistible!
Los frailes de este monasterio franciscano en Cochabamba, Bolivia, rinden culto a San Francisco de Asís, el santo patrón de los animales.
Por eso, y para honrar sus principios, adoptaron a Carmelo, el perro, o como lo llaman cariñosamente, “Fray Bigotón” – un apodo que significa “bigote” en español.
El cachorro se ha convertido en una parte querida del monasterio, repartiendo amor, mimos y enseñanzas incluso a los pececillos del estanque local. ¡A Carmelo hasta le encanta vestir su nueva túnica de fraile!
Carmelo era un perro callejero antes de ser rescatado por el Proyecto Narices Frías.
“Si todas las iglesias de nuestro país adoptaran un perro y lo cuidaran como a Fray Bigotón,” escribió el grupo en una publicación en Facebook, “estamos seguros de que los feligreses seguirían su ejemplo.”
