6 reglas para que los deseos se hagan realidad

¿Quieres que tu deseo se haga realidad? ¡Lee estas siete reglas esotéricas!

Los esotéricos creen que nuestros deseos se cumplen cuando los escribimos correctamente. El problema es que los torbellinos de pensamientos que giran en nuestra mente no pueden ser captados por el universo como un deseo.

Pero si logras concentrarte en tu deseo y seguir estas SIETE reglas, ¡tus deseos seguramente se harán realidad! Lee, presta atención y guarda para no perder.

Regla 1. Es necesario escribir el deseo…
Asegúrate de escribir tu deseo con esmero y buena caligrafía. ¡Fácil de decir, difícil de hacer! A pesar de la aparente simplicidad, no es nada fácil escribir correctamente tu deseo.

Analicemos con ejemplos: «Quiero tener mi propia casa». ¿Es correcto? Resulta que es fundamentalmente incorrecto. El problema es que tal deseo podría cumplirse, pero surge la pregunta: ¿cuándo? ¡Los deseos sin plazos concretos son inútiles! Recuerda esto. Por eso, la siguiente regla dice:

Regla 2. El deseo debe tener un tiempo de cumplimiento
Por ejemplo: «En el verano de 2025, tendré una gran y hermosa casa de campo». Pero si piensas: «Voy a comprar una casa de campo», eso sería incorrecto. Lo que has escrito podría hacerse realidad, pero no se sabe cuándo. Así que, antes de escribir tu deseo, piensa, ¿cuándo quieres que se cumpla? (Dentro de límites razonables, por supuesto). Y solo entonces pasa a la tercera regla esotérica:

Regla 3. Escribe el deseo en tiempo presente
Es decir, en lugar de: «Voy a comprarme una casa», deberías escribir: «Me he comprado una casa». ¡Un punto crucial! Es decir, debes imaginarte que ya TIENES la casa.

Regla 4. Escribe con detalle, emoción y con el corazón
Si deseas tener una nueva casa, descríbela completamente, desde el porche, la disposición y cantidad de habitaciones, hasta el lugar donde pondrás tu jarrón favorito. Imagina tu alegría cuando entres a la nueva casa y descríbelo en papel. ES muy importante que tu deseo no cause daño a otras personas, de este principio surge la quinta, sexta regla:

Regla 5. Finaliza el deseo escrito con una oración o frase protectora
Después de escribir tu deseo, pide humildemente ayuda a las Fuerzas Superiores. Si crees en Dios, reza para que se cumpla tu deseo. Si eres ateo, inventa tu propia frase protectora. Por ejemplo: «Que mi futura casa se llene de alegría y felicidad. Que mis hijos y nietos continúen su linaje aquí, llenando sus vidas y la mía de amor. Que este deseo me traiga no solo felicidad, sino algo más grande».

¿Notaste la fórmula: «algo más grande»? No limites al universo en sus esfuerzos por ayudarte. Tal vez considere que mereces no solo el deseo que pediste, sino también otras bendiciones.

Luego, debes liberar tranquilamente el deseo al universo e incluso casi olvidarlo. Preocuparse y pensar obsesivamente solo impedirá que se cumpla. Por eso existe:

Regla 6. Nunca te obsesiones con tu deseo
Libera tu sueño, pero actúa. Al escribir el deseo y guardar el papel en un lugar escondido, no pienses que es todo. Actúa en pos de tu sueño, pero sin obsesionarte con él. Y no rompas la armonía del universo, arrasando con todo a tu paso para lograr el objetivo. Actúa sabiamente, razonadamente, y tu deseo seguramente se hará realidad.