Un gato querido llamado Artie, perdido durante 12 años, finalmente se reúne con su familia
Un galés se ha reunido con su gato familiar, que había estado perdido durante 12 años.
Con tan solo 17 años, Theo-Will McKenna estaba estudiando en una universidad cerca del hogar familiar en Connah’s Quay, Gales, cuando su gato Artie salió de casa y nunca regresó.
McKenna recuerda haber pasado horas buscando con una bolsa de golosinas, pero no pudo localizar a su querido gato blanco y gris. Durante meses, volvía una vez por semana para continuar la búsqueda, pero gradualmente perdió la esperanza de volver a verlo.
“Llegué al punto en el que pensé que, ojalá no, algo le habría pasado o alguien más lo habría acogido”, dijo.
En 2024, los residentes de una casa en Connah’s Quay llamaron a un veterinario local después de que un gato gris y blanco apareciera en su patio trasero y permaneciera allí durante cuatro días seguidos.
El veterinario que respondió encontró que el gato, que resultó ser el desaparecido Artie, llevaba un microchip registrado a nombre de la madre de Theo-Will McKenna y un número de contacto de North Clwyd Animal Rescue (NCAR).
NCAR recibió la llamada y recogió a Artie, pero dado que el microchip estaba registrado a un número de teléfono antiguo, recurrieron a Facebook para tratar de encontrar a los McKenna. Al parecer, uno de los amigos de Theo-Will reconoció a Artie y le envió la publicación.
“Lo estabilizaron y luego publicaron en su página de Facebook explicando que lo habían encontrado… Mi amigo lo vio y me envió la publicación; me tomó un segundo reconocerlo porque se veía tan desaliñado y delgado”, dijo McKenna.
“No parecía real. Pensé que no podía ser él”, agregó. “Habían pasado 12 años; desapareció cuando yo tenía 17. Pensé que ningún gato podría sobrevivir 12 años en la calle”.
Artie recibió tratamiento médico muy necesario: “Le sacaron algunos dientes, trataron su hipertiroidismo y eliminaron algunos bultos precancerosos en sus orejas”, comentó McKenna, añadiendo que aunque los días de Artie en las calles habían quedado atrás, nuevos desafíos surgieron, como adaptarse al otro gato de McKenna.
“Aún estamos en el periodo de prueba, pero él ha estado completamente bien. Ronronea como loco cada vez que me acerco a él… Mi otra gata ha estado un poco recelosa, pero hemos estado usando métodos de introducción y acostumbrándola a su olor. Es un proceso lento, pero estoy absolutamente decidido a que se quede conmigo”.
McKenna creó una página en GoFundMe para asegurar que Artie, de 16 años, reciba toda la atención médica que necesita en los años crepusculares de una vida tumultuosa. Su cuidado veterinario cuesta alrededor de 65 dólares al mes.
